Un joven de 19 años murió atropellado por un tren en la ciudad de Forres, provincia de Santiago del Estero. La víctima, Marcelo Daniel Iñigo, había salido con un grupo de amigos y cuando regresaba a su hogar se habría quedado dormido en las vías del ferrocarril. Un vecino halló el cuerpo y dio aviso a la Policía local.

Todo ocurrió entre la madrugada y la mañana del domingo. Iñigo salió con amigos y cuando regresaba a su hogar se quedó dormido en las vías del ferrocarril. Horas después, cuando el tren pasó por esa zona lo arrolló y el joven de 19 años murió en el acto. El cuerpo fue encontrado por la mañana, por un vecino que caminaba por la zona, vio los restos del joven y dio aviso a la Policía.

Al conocer la noticia de que un joven había sido atropellado por el ferrocarril, uno de los hermanos de Iñigo asistió al lugar, ya que Marcelo no había regresado a la casa tras haber salido con amigos. Como tampoco contestaba los mensajes, pensó que podría tratarse de su hermano. De acuerdo a fuentes policiales, el cuerpo se encontraba mutilado y era irreconocible. La ropa fue fundamental para saber que se trataba del joven de 19 años.

Por el caso tomó intervención el fiscal Pablo Moya, quien ordenó que el cuerpo sea trasladado a la morgue judicial y que se practicara la autopsia, según informó el sitio Nuevo Diario Web.

Además, llamó a declarar a los amigos de la víctima, así como también a la novia del joven, con el objetivo de dilucidar si se trató de un accidente, un suicidio o si pudo haber sido asesinado, aunque una médica forense confirmó que el cuerpo no presentaba lesiones compatibles con golpes ni signos de defensa.