"Mamá, perdón por esto". Esas fueron las últimas palabras que Charlie Proctor, de 5 años, le dijo a su mamá antes de morir en sus brazos, tras luchar durante 2 años contra un cáncer de hígado.

La madre, Amber Schofield, explicó que lo último que hizo su hijo fue disculparse por todo lo que tuvo que atravesar la familia en el último tiempo. La enfermedad le fue diagnosticada en 2016, pero su situación empeoró cuando se expandió hacia sus pulmones en los últimos meses.

 Charlie junto a sus padres y a su hermana menor Jessica

La familia del niño, oriunda de Accrington, en Inglaterra, trató desesperadamente de salvar al niño en el último tiempo, pero el problema era que no contaban con el dinero suficiente. Necesitaban casi un millón de libras para costear el trasplante de hígado y el traslado a Estados Unidos, donde se iba a realizar la operación. No llegaron a conseguir ese monto a tiempo a pesar de la ayuda de varias celebridades, entre ellas la cantante estadounidense Pink.

El mes pasado, los médicos le informaron a Amber que a su hijo le quedaban dos semanas de vida. Hasta ese momento, no habían llegado siquiera a la mitad de los fondos necesarios.

La familia compartió la historia de Charlie en una página de Facebook, donde no sólo pedían ayuda, sino que también contaban la evolución del pequeño.

"Él se durmió en paz entre mis brazos y los de su padre. Nos duelen nuestros corazones. El mundo perdió a un chico increíble", escribió Amber cuando murió el pequeño.

"No sólo fuiste nuestra mayor inspiración, sino también para miles de personas de todo el mundo. Me enseñaste lo que significa el amor, Charlie. Ahora es hora de volar, estoy orgullosa de ti", escribieron los padres en otra publicación.

Ahora, Amber Schofield y su esposo, Ben Procter, apuntaron contra el Servicio Nacional de Salud de Inglaterra (NHS, por sus siglas en inglés), por la muerte del pequeño.

El matrimonio denuncia que las autoridades le negaron el trasplante a su hijo, y que los doctores le plantearon que el mismo no le aseguraría que su hijo sobreviva. "El cáncer es un juego para gente rica" afirmó la mujer, según informa el diario británico Daily Mail.