"Cuando parecía que sólo era un sueño inalcanzable, llegaste vos. Todo se empezó a transformar en una dulce realidad. A veces la vida te pega tanto que, ante una caricia, vos te tapás con miedo. Y hay que insistir. Y vos insististe con una paciencia infinita”. Con esa frase empezó el día de su boda Jorge Rial.

El conductor de Intrusos le dedicó unas tiernas palabras a Romina Pereiro, la nutricionista que pasó a ser formalmente su mujer, y ambos pasaron por el Registro Civil y de ahí a una fiesta muy íntima para celebrar la unión. Pasadas las 17 llegó el conductor en su camioneta a El Abierto, el salón ubicado en el barrio de Villa Urquiza. Dentro de los primeros invitados en llegar a la ceremonia íntima se encontró Morena Rial, quien fue escoltada por su novio, Facundo Ambrosioni, y con el pequeño Francesco Benicio, de menos de un mes.

Momentos después del arribo de Rial llegó la novia pero a diferencia del conductor de Intrusos que acudió a la cita en soledad, la flamante novia no arribó al lugar sola, lo hizo escoltada por sus dos hijas, Violeta y Emma, frutos de su pasada relación. Feliz y con una sonrisa amplia, la novia tenía puesto un refinado y sensual vestido blanco que le diseñó Paz Cornú, quien fue al evento con su marido, Diego Orden. Pero ese no fue el único vestido que se puso Romina ya que para la fiesta, la diseñadora le hizo otro mucho más cómodo para poder divertirse.

A la fiesta asistieron casi cien personas y no estuvo plagada de famosos. Marcelo Polino, Marcela Tauro, Adrián Pallares, Daniel Ambrosino, el empresario Guillermo Marin, junto a su mujer Valeria Archimó, fueron las caras más conocidas de un evento sin celulares, tal como pidieron los novios.