Desde su divorcio de Brad Pitt, hace dos años, a Angelina Jolie nunca se la había vinculado con una nueva pareja. Hasta ahora. Es que la actriz, luego de doce años de relación y una escandalosa separación, prefirió el perfil bajo.

En este tiempo, mientras a Brad se le adjudicaban varios romances (incluso se habló varias veces de un regreso con su ex, Jennifer Aniston), Angelina estuvo dedicada al trabajo, a sus seis hijos y a las tareas humanitarias.

Pero a los 43, Angelina no renuncia al amor. Y estaría dándose una nueva oportunidad junto a un nuevo novio que sería nada menos que Keanu Reeves.

Según la revista australiana News Weekly, el romance entre las estrellas ya llevaría un año. Pero ambos supieron mantenerlo casi en secreto, salvo para un puñado de íntimos.

Jolie y Reeves nunca coincidieron en un set. En el caso de ellos no los unió el trabajo sino el vecindario. Hace un año, Angelina se mudó a una nueva mansión en Los Angeles junto a sus hijos. Y su vecina más cercana resultó ser Patricia Taylor. La señora es la madre de Keanu.

Aparentemente, Patricia fue quien ayudó a que su nueva y famosa vecina y su hijo, se acercaran y comenzaran un noviazgo.

Reeves, de 54 años, se lleva muy bien con su madre y la visita con mucha frecuencia. Fue así como empezó a vincularse con Angelina, con la ayudita de su mamá.

Alejado de escándalos, el perfil más tranquilo de Reeves es una de las virtudes que sedujeron a Angelina que venía de mucha exposición por los roces con Pitt por el divorcio y la tenencia de los hijos en común.

Keanu se lleva muy bien con los hijos de Angelina y eso también resultó decisivo para que Angelina aceptara probar una vez más, una relación amorosa. Un romance que, por ahora, ambos prefieren que quede en la intimidad.